Por Jorge Vindel González, Raquel Lorenzo Alonso y Lucien Vargas Giagnocavo.
Nos enfrentamos a un mundo más complejo, en el que las crisis económicas se han intensificado en los últimos años, y donde la economía global está inmersa en un difícil escenario geopolítico, mientras que se están produciendo al mismo tiempo importantes transformaciones estructurales.
Como claro ejemplo de ello destaca el mayor papel e intervención de los Estados en la economía a nivel global, apoyándose en muchos casos en argumentos de seguridad y generando intensos debates sobre el equilibrio entre la necesidad de la intervención estatal y de la libre empresa. Todo esto, está derivando en la creciente relevancia de la geoeconomía dentro del debate económico y en un resurgimiento de la política industrial.
Si bien, el aumento de la intervención estatal se confronta también con el creciente papel de las empresas transnacionales, de la mano en muchos casos de la transformación digital. Según se aprecia en la tabla de la izquierda en nuestro gráfico del mes Ee, la capitalización bursátil de ciertas empresas es superior al Producto Interior Bruto de grandes países, como es el caso de Francia, cuyo PIB de 2023 es superado por la capitalización de Microsoft; y los casos de México, Corea del Sur y España, cuya producción es superada también por la capitalización de Apple, Nvidia, Google, Amazon y Saudi Aramco.
Mientras que, en la tabla de la derecha se observa asimismo que los ingresos de las grandes compañías transnacionales superan en muchos casos los ingresos de los gobiernos de importantes países. Es el caso de la estadounidense Walmart, respecto de Países Bajos o México. En este caso se observa, además, la entrada en el ranking de empresas de países no pertenecientes a la OCDE entre las compañías con más ingresos del mundo, como son Saudi Aramco y Sinopec, en el sector energético. Siendo también reflejo del aumento del peso de sus economías y de su irrupción como nuevos actores geopolíticos que están compitiendo por la hegemonía internacional o regional. No obstante, todavía no se encuentran muchas empresas de países emergentes en la lista de las quince con mayor capitalización bursátil, debido en parte a la estructura del capital de las compañías en estos países y a su regulación. Es el caso de China, donde relevantes empresas, con volúmenes muy importantes de ingresos, tienen titularidad pública, al mismo tiempo que mantienen una reducida apertura a la entrada de capitales extranjeros, limitando así su capitalización bursátil.
La clasificación que presentamos en el gráfico pone de manifiesto el gran peso que tienen las empresas de los sectores tecnológico, energético y sanitario o farmacéutico; siendo reflejo, respectivamente, de otras tres grandes transformaciones que está experimentando la economía global: la transformación digital, la transición energética y el envejecimiento de la población.
Estas ideas que presentamos las hemos seleccionado de nuestro último informe que hemos publicado en nuestro Servicio de Información Económica, Ee|Estrategia, convencidos de que la actual era de transformaciones requiere integrar en la estrategia empresarial capacidades de predicción, adaptabilidad y resiliencia. Si resulta de tu interés, puedes acceder al contenido completo del informe a través de nuestro servicio bajo suscripción, con el que de forma muy aplicada a la empresa aportamos nuestro análisis y visión de la situación y perspectivas económico-financieras y también de la evolución del entorno fiscal y regulatorio.
GRÁFICO DEL MES Ee. EL PULSO ECONÓMICO GLOBAL: GOBIERNOS VERSUS CORPORACIONES TRANSNACIONALES.
