Madrid, 13 de mayo de 2020. Sostener la demanda interna y las rentas en el corto plazo de forma transitoria y reversible, financiar la recuperación de manera generosa pero limitándola en el tiempo, controlar la sostenibilidad deuda pública, establecer una legislación clara para generar certidumbre y confianza entre los inversores, y mantener los vínculos comerciales con nuestros principales socios son algunas de las iniciativas que Ricardo Martínez Rico, presidente ejecutivo de Equipo Económico, ha propuesto hoy para afrontar la crisis generada por el Covid-19 en un encuentro digital organizado por Estudio de Comunicación, que ha contado con más de 180 asistentes.
Bajo el título “Situación económica, perspectivas y medidas empresariales”, el encuentro virtual ha estado moderada por Benito Berceruelo, consejero delegado de Estudio de Comunicación, y ha contado con la participación de Emilio Ontiveros, presidente de AFI, y Carlos Fernández, portavoz económico de Grant Thornton.
El presidente de Equipo Económico ha recordado durante su intervención que las previsiones de Equipo Económico apuntan a una caída del PIB español del 10% en 2020, muy por encima de las registradas durante la pasada crisis, mientras el déficit alcanzará el 14% y el endeudamiento público se situará cerca del 120%. “En 2021 tendremos que poner fin a la financiación ilimitada y dar paso a una financiación sostenible, que en parte procederá del exterior. Por esta razón no debemos imponer restricciones innecesarias a los inversores, porque tendremos que recurrir a fondos extranjeros para financiarnos”.
Para afrontar el futuro incierto que dibuja la pandemia, el presidente de Equipo Económico se ha mostrado partidario de trabajar sobre tres ámbitos: “En el internacional, defender el comercio y los vínculos con nuestros socios más cercanos; en el público, establecer una legislación clara para generar certidumbre y una estabilidad regulatoria que permita mantener la confianza de los inversores; y en el ámbito empresarial, asumir un proceso de transformación rápido que permita hacer a nuestras empresas más flexibles”. “Además, ha precisado, el Estado ha de jugar cada vez un papel más relevante en temas como ERTES, inversiones o impuestos”.
Emilio Ontiveros ha manifestado por su parte que el mundo va a entrar en recesión y la caída del PIB será más pronunciada en el segundo trimestre del año. Europa, ha dicho, será la principal tributaria de esta crisis y las economías periféricas (Grecia, Italia, España y Portugal, por este orden) serán las que más sufran. “Para que la economía se recupere Europa tiene que actuar y crear un fondo de reconstrucción que aborde las necesidades de recuperación, adoptando un modelo de transferencias y no de préstamos”.
Finalmente, Carlos Fernández ha precisado que «va a haber un impacto significativo en la cadena de suministros global, que está afectando de forma muy notable a sectores de la economía española como los servicios, la automoción, la logística o las exportaciones, que tradicionalmente han actuado tractores y ahora han dejado de serlo. Debemos ser creativos en las soluciones, más flexibles y acostumbrarnos a vivir con una mayor incertidumbre económica”.
